Existe un valioso potencial ecológico y económico en el manejo responsable de la energía. En la industria productiva en particular, la energía es altamente significativa como un factor competitivo. Es aquí donde la norma internacional ISO 50001 entra en juego: apoya y orienta a las empresas e instituciones en el ámbito sistemático y en el funcionamiento de los sistemas de gestión de energía (EnMS) y en los procesos relacionados para la mejora continua de la eficiencia energética. Las empresas pertenecientes a la industria productiva pueden beneficiarse de una posible reducción de impuestos y otros beneficios si son capaces de demostrar que manejan la energía de una manera responsable, aumentan su eficiencia energética y establecen objetivos de ahorro energético. Un sistema de gestión de energía certificado no sólo es recomendable para las empresas que deseen beneficiarse de las prestaciones legales que esto ofrece, sino también para cualquier organización que desee mejorar de forma sustentable su eficiencia energética y su rentabilidad. Además de la industria productiva, esto también incluye el comercio y empresas de servicios, así como instituciones pertenecientes al sector público.